Una mirada a las tapas
Son reflejo de un estilo de vida, de una cultura, de una historia, de una forma de relacionarse y de reinterpretar la cocina tradicional. Calidad, armonía y presentación, son los tres conceptos fundamentales para conseguir una tapa digna del mejor gourmet. La presentación de esta tapa de erizo nos sirve cómo ejemplo. Nos sorprendió encontrarla en un mediodía tranquilo por la ciudad, y ella nos ha inspirado este post que hoy os dedicamos.
Hay diferentes historias que nos hablan del origen de la tapa, una de ellas nos remonta al reinado de Alfoso X el sabio, se cuenta que durante la convalecencia de una enfermedad le prescribieron vino, y el rey, entre sorbo y sorbo, pedía pequeños bocados de comida para evitar los efectos del alcohol, cuando se restableció impuso que en los mesones se pusiera junto al vino, alguna vianda. Otra de las historias habla de Cádiz y un mesonero que fue a servirle al Rey Alfonso XIII un jerez y en ese momento sopló el viento, y para que no entrase nada en la copa de su Majestad, le colocó una loncha de jamón encima de la copa a modo de “tapa”; otra de ellas nos habla de la necesidad de los labriegos en Andalucía de tomar un tentempié durante el trabajo, con lo que junto a la bebida le ponían encima, al servirla, una tapa con jamón u otro alimento similar.
En la actualidad, el mundo gastronómico está girando su mirada hacía las tapas desde Ferran Adrià, promotor de la cultura de la tapa en el extranjero, hasta Dani García con su espacio La Moraga o Paco Roncero con Estado Puro, entre otros muchos ejemplos, los grandes Chefs nos están dedicando parte de su creatividad a mostrarnos cómo hacer y presentar una tapa.
¿Cómo sorprender a tus amigos con un excelente aperitivo o con una original cena de tapas? El secreto está en mezclar de forma adecuada innovación y factor sorpresa, tanto en lo singredientes como en la presentación.
Prueba a mezclar texturas y sabores y preséntalos sobre elegantes cucharas negras o blancas; haz cremas de vivos colores, gazpacho de remolacha, chupito de zanahoria y ofrécelos en pequeñas vasos transparentes, compón tu mejor tapa tradicional y dale un toque en la presentación, colocándola sobre un lecho de vegetales o preséntala con una salsa agridulce, decóralas con albahaca o perejil, atrévete con los dip, utiliza como soporte los propios alimentos…. Tu creatividad será tu mejor aliada, mezcla tradición y modernidad junto con un toque chic.
Y por último, no olvides las sensaciones de tus amig@s, es fundamental llegar a ellas, envuélvelos en un espacio adecuado en tu casa dónde tod@s se encuentren cómodos, utiliza tu imaginación para dar nombres a las creaciones y cuéntaselo a ellos, recuerda que la tapa no es un mero aperitivo, es un momento para hacer amistad y un placer gastronómico. Es cierto, que están de moda, aunque en muchas provincias españolas siempre han sido seña de identidad.