¿Sabéis el origen de la expresión «hacer buenas migas»?
Es un plato de los contundentes dentro de nuestras fronteras. Rico de sabor y perfecto para aguantar en épocas de frío. Su origen se remonta a las épocas del pastoreo trashumante. Es un plato típico que se cocina a base de pan, pimientos, chorizo, ajo, sal y el ingrediente que no puede faltar aceite de oliva Ybarra.
Los pastores solían llevar estos alimentos en sus grandes caminatas para dar de comer al ganado a lo largo y ancho de nuestra geografía. Cuando transcurría el tiempo, entre jornada y jornada, el pan terminaba poniéndose duro y había que agudizar el ingenio, no sólo para no pasar hambre, sino para disfrutar mientras se comía. Fue así cómo se originaron las migas, los pastores decidieron desmigar el pan y mezclar todos los ingredientes con aceite de oliva y así nació este exquisito manjar y la expresión a la que da nombre: hacer buenas migas. Los pastores compartían ente ellos las viandas que tenían para hacer buenas migas, es decir, para hacer un plato entre todos, común para comer y para compartir con los demás con agradables momentos donde se daba gusto al paladar y a la compañía, se creaban nuevos vínculos y se afianzaban las amistades.
Nosotros os hemos cocinado este plato con aceite de oliva Ybarra y hoy os queremos recordar una receta que os puede acompañar en estos días de invierno: MIGAS en Ybarra.