Los Garbanzos
Hemos adelantado nuestra visita al mercado para comprar y nos hemos acordado de algo muy importante…ayer os dejamos nuestro Potaje Ybarra de garbanzos, espinacas y langostinos y hoy hemos encontrado estos maravillosos garbanzos y os vamos a contar qué aporta a nuestra salud esta legumbre ingrediente básico, y a veces olvidado, de la dieta mediterránea.
Su origen, aunque incierto, se ubica en el Mediterráneo Oriental, probablemente en Turquía o Siria. y se cultivan desde la prehistoria. El Antiguo Egipto, Grecia y Roma ya sabían de sus virtudes y propiedades para la salud.
Muchas son sus variedades y entre las más conocidas en España están el: Fardón, Alcazaba, Blanco andaluz, Bujeo y el literario Fuentesaúco como los de nuestra foto, y otra de las variedades que por apreciada merece mención aparte es el Pedrosillano, muy apreciadas en nuestro País, son de menor tamaño, piel muy fina y textura mantecosa y todo chef o gourmet que se precie sabe de su exquisito sabor.
En cuanto a la salud, el garbanzo es rico en proteínas, en almidón y en lípidos, contiene ácido fólico y es un antioxidante natural. Además poseen vitamina E y minerales cómo el Potasio, Fósforo, Calcio, Magnesio y Sodio. Son una gran fuente de fibra e hidratos de carbono. Son recomendables para reducir el colesterol, diabetes, anemia además de ser anticancerígeno. El magnesio además es un gran aliado para luchar contra los problemas generados por el estrés.
¿Y queréis saber una de esas curiosidades que tanto nos gusta contaros? ¿Cuántas veces hemos dicho “Un día es un día”? ¿Sabéis de donde viene? De nuestros queridos garbanzos…: ”Un día es un día, pensó el avaro. Y añadió a la olla un garbanzo”.
