Cuidados de los utensilios de cocina de Acero Inoxidable
Que las prisas son malas consejeras, ya lo hemos dicho alguna vez en uno de nuestros Post, pero luchar contra los tiempos que corren tampoco podemos hacerlo, este ritmo vertiginoso que acompaña la entrada del siglo XXI, hace que en nuestro día a día prestemos, a veces, menos a atención a sencillos consejos que pueden hacernos la vida más fácil.
Por eso hoy, os queremos hablar de cómo mantener y alargar la vida de los utensilios de acero inoxidable, ya que son nuestros infatigables compañeros en la cocina y un buen cuidado de ellos, hará que nuestros guisos, carnes, pescados y verduras ganen en sabor y color.
El primer consejo y el más importante es intentar no utilizar detergentes abrasivos ni amoníaco para limpiar las superficies de acero inoxidable, si estás apuntado a nuestra promoción verás que el fondo de nuestra besuguera está realizado en acero inoxidable 18/10 Cromargan®, material con las mejores propiedades de uso y calidad y que gracias al 18% de cromo es inoxidable. El niquel aporta brillo, lo hace resistente a los ácidos y le da un brillo característico. Por otro lado su fondo, TransTherm® consta de un núcleo sólido de aluminio encapsulado por acero inoxidable cromado que evita el deterioro por detergentes agresivos y que se peguen restos de comida, lo cual facilita su limpieza.
Si eres uno de nuestros tres afortunados, no tendrás que preocuparte demasiado de tu besugera, pero eso no significa que el resto de utensilios de acero inoxidable se mantengan solos :))! No todas las superficies son iguales, así que recuerda utilizar esponjas suaves para su limpieza, agua caliente y secar inmediatamente después de su utilización, así eliminaremos el sobrante de agua y evitaremos que queden restos de sabor u olor del alimento cocinado, para ello son perfectos los paños de limpieza de microfibras.
Si finalmente y aún poniendo todos nuestros sentidos en la cocina nos depistamos o con el paso del tiempo surgen esos pequeños arañazos… ya que hay quien tiene un verdadero idilio con su olla de toda la vida! Hace poco nos ocurrió esto en una comida casera en casa de la abuela de uno de nuestros compañer@s: ¡la olla exprés familiar, tenía más de 25 años! Al preguntar a Pilar, su dueña, como la consevaba, nos dijo que si alguna vez se le pegaba la comida nunca raspaba el interior, la ponía a fuego lento con agua y jabón en el fogón hasta que se despegaba y después empapaba un algodón en aceite de oliva y lo pasaba por la superficie… y todo hay que decirlo, tenía una olla con solera y el tradicional potaje de calabaza que nos hizo, era digno del mejor de los restarurantes.